Amor

La locura del amor nos hace hacer grandes locuras y una de ellas es; saltar al vacío. Ese vacío está lleno de lo que recibimos y damos, porque todo amor es lanzarse a un abismo...
Todo amor es un salto al vacío...

Sumérgete en el azul

A veces nos sumergimos en un mar de azul intenso, dónde también incluimos la profundidad de nuestro personal universo...
Entre el azul, olvidamos todo lo adverso, sólo el alma sumergida vive la alegría de estar en sintonía con nuestro cuerpo...
Bajo este mundo callado, donde el agua es caricia los pensamientos carecen de fundamento...

A veces sucede...

A veces sucede, que la visión de muchas imágenes nos ciegan y no nos dejan ver la situación de conjunto. Es como estar en un mundo irreal...
Lo maravilloso de un paisaje, puede convertirse en un lugar donde podemos dudar de estar...
Hay situaciones en la vida donde más que vivir, nos parece soñar...
Aunque no lo creamos estamos hechos para las pequeñas dosificaciones en todas las emociones...
Lo superlativo siempre nos quita claridad de visión. Lo demasiado, no lo asimilamos y aunque a veces no tengamos otra opción, podemos sopesar hasta dónde somos capaces de llegar, sin necesidad de fragmentarnos ni dejarnos cegar...

¿ Vocación o ambición ?

La vocación es algo tan personal, que incluso puede superar a todo lo estudiado. Ella, nos hace estar a gusto con lo que hemos soñado y deseado y es ella, la que nos hace alcanzar un alto grado de perfección...
Si no hay vocación, entramos en el juego de la ambición, dónde se cometen muchos fallos...
La ambición, puede ser una obsesión y con ella pocas veces se alcanza la perfección...
Aprender y saber es un reto, pero ser y responder a las sugerencias personales es hacer con nuestra vida lo mejor...

El recodo de la dicha

En esta hora mágica del atardecer, tus ojos buscan ese camino que se ha borrado y te das cuenta de como ha pasado el tiempo...
Ese camino iba contigo, era tu amigo y siempre te ofrecía un lugar para el reposo...
Como la vida es cambiante, dejaste de ser caminante de ese paisaje ondulante...
Tu nuevo coche hoy corre sobre gris monotonía y él y tú ignoráis la belleza escondida de ese camino, que un día formo parte de tu vida...
Con los años has olvidado los colores del ocaso y el tiempo se ha convertido en un bien escaso...
Lo peor es, que por culpa de la prisa se haya borrado tu sonrisa...
Te sugiero vuelvas al camino y busques el recodo de la dicha, para recuperar la sonrisa...

Descansar de vivir

Somos millones de humanos cansados, extenuados del ir y venir y la verdad es que no sabemos descansar de vivir...
Para algunos el descanso está en dormir y durmiendo uno se olvida de todo, con el inconveniente de que al despertar nos encontramos de nuevo con ese todo y aún más...
Descansar de vivir puede no estar en dormir, sino precisamente lo contrario que es: vivir una ilusión, una emoción...
En ese ir y venir de los humanos, muchas idas y venidas se podrían suprimir y tener mas tiempo para reír...

Tela de araña

Como la tela de araña, tejen los hombres sus hilos y enredan calladamente los caminos...
El hombre teje la tela, como la araña sus hilos...

Un doble espejismo

Tu cuerpo forma parte del paisaje, pero tus ojos no soportan la grandeza del abismo...
Lo que ves es, un doble espejismo: la lejanía y la cercanía de ti mismo...
Intentas comprender la insoportable grandeza que te rodea y ahora empiezas a ver ese otro espejismo: la grandeza del abismo y la grandeza de tu pequeñez...

Eco de notas perdidas

La música de la lluvia, a veces es llanto y otras es risa...
Canta el desierto reseco y su música es un eco de notas perdidas...
Todo canta y todo llora y hasta el azul de las olas tienen cadencia de baile...
Notas mil veces cantadas del bosque reverdecido, dónde nuestro canto humano no tiene ningún sentido...

Un viaje alucinante: el instante

Hay un viaje alucinante, en el instante...
En un instante, tomamos las decisiones, que en la mayoría de los casos se convierten en acciones. A veces son corazonadas o sensaciones de precisión...
Habremos de aceptar, que la mente nos engaña muchas veces y siempre es el corazón el que nos da otra forma de visión...
Nuestra osadía, tiene mucho de rebeldías con la pequeñez de nuestro yo, dónde muchas decisiones las tomamos al instante...
En ese viaje alucinante hay muchos contrastes, por un lado vacilamos y por otro anulamos al temor...
En la vida siempre estamos divididos, confundidos y eso de ser osados con el instante puede llevarnos a muchos fallos...

Plan de emergencia

Los humanos tenemos un plan de emergencia: la inteligencia...
La mente tiene respuestas, que siempre están disponibles. 
Sólo hace falta saber cómo y cuándo usar esas respuestas...

En el corazón de la roca

La roca, centenaria y solitaria, aún sin palabras habla de los siglos y del tiempo...
Olvidada en la llanura, sus silencios guardan profundos misterios y siendo cómo es un mineral sin vida, está rebosante de vida y ella da testimonio de vivir sin prisa y su corazón de piedra intuye ese horizonte dónde los humanos corren...
Ella, la roca a pesar de los siglos sigue siendo hermosa...
Las tormentas la han hecho poderosa y la lluvia, que mil veces la ha besado, le ha dado el amor que los hombres le han negado...
Esa roca gris, por donde tantas veces has pasado, es la roca milenaria, cuya auténtica textura está llena de ternura. Ella forma parte de nuestra humana naturaleza porque: tanto ella como nosotros somos, agua y tierra...

Lo más buscado: la felicidad

No somos nosotros los buscadores de la felicidad, es la felicidad la que nos busca y muchas veces no la vemos ni la entendemos...

La felicidad va dejando un rastro de su luz en muchas circunstancias de la vida. De hecho, cuánto nos rodea lleva el sello de la dicha...

La felicidad es risueña y a veces le gusta jugar a esconderse en algún lugar de nuestra vida...

Ese instante, que podría ser una delicia, no lo vemos porque lo nuestro es la codicia de una felicidad demasiado grande...

Ella insiste en darnos otra visión de la vida: la emoción...

La felicidad está en explorarnos y encontrar los personales recursos humanos y de tener, tenemos demasiados...

Pequeño gran amor

Un gran amor puede llenar nuestra vida, pero a menudo nos olvidamos del pequeño amor de cada día...
El detalle de un beso, que no se espera, una mirada  que busca la profundidad de otra mirada, una diminuta flor de montaña, traída de vuelta de una excursión...
El pequeño amor de cada día, nos lleva al gran amor por la vida...

Asomarse al vacío

Como somos caminantes, siempre queremos alcanzar el misterio de muchas lejanías, para asomarnos al vacío y rozar el infinito...
Como todo se vende y todo se compra, no podremos contemplar las lejanías sino podemos pagar...
En contraposición el ser humano puede dar de lo que es o lo que tiene...
No alcanzaremos la gloria, ni pasaremos a la historia, solo nuestra memoria conservará la gratificante sensación de lo que significa dar...
No importa la creación personal, sino ese balcón donde permitimos que muchos se asomen y puedan poder ver la vida con otra visión...

No digas nada

A veces no sabes que decir y parece, que no te salen las palabras, sera mejor no insistir...
Usa solo la mirada para transmitir los deseos de tu alma...
Canta una canción y deja en cada nota una palabra...
Si no sabes que decir, no digas nada...
Hoy tampoco yo sé decir palabras, pero has de saber, que: el silencio habla...

Sé águila, vuela

A veces no eres tú, es cuanto te rodea lo que te lleva...
Tú quizás quisiste ser águila para poder contemplar la grandeza de la inmensidad y luego descansar en la tibieza de una roca suspendida...
Aunque no puedas volar, imagina : 
No es cuanto te rodea lo que te lleva , sino esas alas escondidas en tu corazón...
VUELA...

Un emblema para la vida

Ha nevado y el paisaje es como un lienzo blanco. Lo comparamos con el significado de nuestra vida...
Ya cuando nacimos nos dieron un papel para escribir en él y tuvimos que aprender a trazar caminos, paralelos o alejados de los caminos ajenos...
Muchas veces tuvimos que pensar como salir de ese desierto del desaliento y otras veces a resistirnos ante otros pensamientos...
Nuestro paisaje personal puede hacer, que nos sintamos perdidos...
Mira el lienzo en blanco de tu existencia y decídete a plasmar sobre el papel de tu vida: una hoguera, esa hoguera será en adelante el emblema, que de luz y calor a tu vida...

Sólo palabras

En la lejanía un reloj canta las horas y ahí donde las palabras se quedan flotando, te olvidas de la prisa de la vida...
Muchas palabras han roto el hielo de los silencios, otras te dieron la dicha...
Sólo las palabras que se han quedado a tu lado, pueden ser las que den sentido a tu vida...
En la penumbra, palabras y en el silencio, tu alma emocionada...
Palabras a media voz, reverenciando el silencio, para darte la visión de lo que no puedes ver...
Palabras...

Entre las nubes y el cielo...

Entre las nubes y el cielo, entre la tierra y el mar, tu sueño está...
Sólo tú eres dueño de tus sueños y dueño de esas alas, que te harán volar...
Desde las alturas, nada será igual, sólo tu mirada embelesada buscará caminos y todos los demasiados, que las alturas te den, no serán nada comparados con tu alma extasiada...

El mayor reto

No somos lo que pensamos y ni siquiera sabemos adónde vamos...
Nuestro paso es, una huella vacilante que se borra a cada instante...
Buscamos las lejanías de los retos de la vida, cuando tenemos a nuestro lado el mayor reto: el día a día...

Cansancios...

Este es un elogio a los cansancios de los hombres, mujeres y niños...
Cansancio de peregrinos; hombres mujeres y niños, que avanzan por los caminos. Madres sin dormir meciendo a sus hijos...
La noche siempre nos lleva a cansancios infinitos y lo que más nos angustia es el llanto de un niño...
Cansancio de oír cada mañana al despertador y cansancio al atardecer, después de un día agotador...
Pero hay otros cansancios, los del alma y el corazón, cuando no se recibe una sonrisa o una caricia, cuando nos cansamos de tener ilusión...
Esos cansancios del alma , que nos quitan la calma son a veces el resultado de no tener una mano en nuestra mano...
Cada ser humano tiene su cansancio y muchos cansancios se guardan en lo secreto...
También están los cansancios- dilema: cuando uno se cansa de amar o de trabajar e incluso de estar donde está...
El cansancio humano es profundo como un mar...
Lo peor es, que nuestro planeta esta cansado de esperar una respuesta positiva de la humanidad...

Una palabra, una mirada

Los gestos humanos pueden herir o curar...
Una mirada, una palabra pueden ser un bálsamos en muchos momentos de la vida...
Una palabra, una mirada pueden abrir muchas heridas...

Lo irrazonable del realismo

Os propongo una visión diferente de la vida, basada en el optimismo y el realismo...
Bueno, eso del realismo quizás os haga reír o quizás tampoco lo aceptéis...
Esta es una visión personal...
Vamos de viaje con nuestra maleta. ¿Porqué tenemos que cargar con una maleta o varias maletas?
A la maleta la arrastramos y ella (la maleta) nos arrastra a nosotros y encima tenemos las manos inutilizadas por culpa de las maletas y si las perdemos, estamos perdidos...
Eso de la maleta es un tema bastante aburrido, pero está lleno del contenido de cosas, que no usaremos...
La contradicción es no poder meter en la dichosa maleta; los problemas y al menos durante el viaje, olvidarnos de ellos...

Otra visión

Somos seres impasibles, apenas nos conocemos...
Continuamente recibimos mensajes en el fondo de la mente, cuya elocuencia bastaría para hacernos vivir mejor la vida, pero continuamente borramos lo que pensamos...
Nuestro circulo es un circulo vicioso, donde casi nunca encontramos el momento de poner en movimiento la máquina del pensamiento. Esa maquinaria extraordinaria, si no se cuida se oxida...
¿ Porqué no nos conmovemos ante esa flor de sutiles pétalos?
La respuesta podría ser: que tiene más importancia saber el tiempo que va hacer o estar buscando una definición, que no hace falta pero estás empeñado en encontrarla...
Conmoverse, emocionarse es salir de lo habitual, es adentrarse en la sensación de la emoción y sorprenderse a cada instante de los mensajes, que nunca hemos leído...
En ese circulo tan nuestro y personal, tenemos la butaca de la comodidad y ahí sin movernos queremos ver lo que en realidad no veremos: otras alternativas de visión, la emoción de dar valor a lo que nadie da valor: una flor...